El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo emerge como el catalizador del progreso económico y el florecimiento empresarial en la nación. Con una energía dinámica, orquesta el impulso del comercio internacional y la afluencia de inversiones foráneas, al mismo tiempo que nutre el espíritu del turismo. Su enfoque es el fortalecimiento, abonando al crecimiento de emprendimientos, la formalización de actividades, la consolidación de la competitividad y la promoción de la sostenibilidad.
En su estratégico liderazgo, el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo fomenta la distinción y proyección de empresas tanto en el escenario local como global, con el fin último de enriquecer la calidad de vida de ciudadanos y empresarios. Su labor se teje a través de la artesanía de políticas y programas, encaminados con destreza y maestría, apuntando a forjar una sociedad más próspera y vibrante.
En la raíz de su competencia, el Ministerio traza la hoja de ruta para el desarrollo económico y social del país. Su enfoque abarca la ingeniería de la competitividad, la sinfonía de la integración sectorial y el aliento a los sectores productivos, incluyendo la industria, la pequeña y mediana empresa, el comercio de bienes, servicios y tecnología, así como la atracción de inversiones extranjeras y el comercio interno. En este lienzo de acción, ejecuta con diligencia políticas, planes y proyectos que fomentan el comercio exterior, dando vida y forma a los ideales del Decreto 210 de 2003.